El pasado 1 y 2 de marzo, cinco personas que cursan esta asignatura -entre los que me encuentro, (si no, no estaría escribiendo esto)- acudimos al VIII Congreso de Periodismo Digital que se celebró en Huesca. En este espacio, de intercambio de pareceres, de omnipresente interactividad todos los participantes pudimos acercarnos y profundizar en una temática muy vinculada a esta materia.
En esta edición de un encuentro que año tras año se consolida, el debate entre prensa escrita y prensa digital surgió "desde el primer minuto", apelando a términos futbolísticos. El director de ABC, José Antonio Zarzalejos, ponente de honor de la inauguración del Congreso y Arsenio Escolar, máximo impulsor del diario gratuito 20Minutos se enzarzaron en una diatriba en tiempos distintos, haciendo mención a la credibilidad, la "webización del papel", la fusión de redacciones, la responsabilidad como informadores, la "inmigración digital" o la desprofesionalización del periodismo. Ambas posiciones respondieron a una idiosincrasia personal que abogan por posturas diametralmente opuestas. La visión de Zarzalejos, más lejana a la integración entre formatos se alejaba de las tendencias dominantes pero se acercaba a la realidad de los medios, a la necesidad de información veraz, interpretativa, carente de rumores y participativa pero desde criterios depurados. Escolar, sin embargo pretendía convertir al ciudadano en parte activa del periodismo sin una apelación clara al control de dichos contenidos en medios muy accesibles al conjunto de la sociedad.
Posteriormente, las ponencias se sucedieron; los polifacéticos Enrique Meneses y Carlos Carnicero nos proporcionaron una visión desde el exterior de la evolución tecnológica en la segunda mitad del siglo XX, en lugares como Cuba, Oriente Próximo o EE.UU., siempre bajo la premisa de que "no necesariamente tenemos mejor información por tener mejores medios", tal y como dijo Meneses y de la necesidad de profundizar y de proporcionar reflexividad en las cuestiones tratadas por los medios en cualquier ámbito y soporte.
El asunto chino fue quizá el más atractivo y paradójico; China es un país abierto a las nuevas tecnologías, con grandes restricciones en el uso de Internet y en la apertura a Occidente, así como en el propio tratamiento de su información interna. Vicenç Sanclemente, corresponsal en Pekín de TVE y Antonio Broto, periodista de EFE en China y creador del blog ChinoChano. El momento actual de este país con su coyuntura particular en el aspecto político, económico, social y deportivo (no olvidemos los JJ.OO de 2008) llevaron a conclusiones brillantes y a reflexiones encaminadas a reflejar la importancia de Internet y de sus medios para el futuro de este país y para modificar su carácter más puramente arraigado en la cultura.
Otro de los gurús del periodismo digital presentes en este Congreso fue Juan Varela, que con su blog Periodistas21, nos proporcionó la visión de la Ciudadanía 3.0, una identidad de dominio público en la que la metáfora se convierte en vida, en la que existen imágenes y representaciones de lo real a través de la red, en la que se produce una prolongación del ser para desarrollar una modernidad reflexiva. Para ello, explicó junto con Antonio Pascual Moreno y Laura Díaz el fenómeno Second Life y su incidencia en la creación de una biografía asincrónica digital). Este yo virtual expuesto por Juan Varela es una utopía que cobra fuerza, una simulación a medio camino entre la perfección y la sociedad del riesgo de Ulrich Beck.
El fotoperiodismo con profesionales de prestigio como Samantha Appleton, la prensa local con el caso paradigmático y brillante de El Adelantado de Segovia, el diseño, las revistas en Internet y la incorporación de la red global a la pantalla pequeña (teléfonos móviles, especialmente) aportaron una perspectiva nueva a lo digital con una profundización más alejada del conocimiento de los profanos -como es mi caso-, pero para el disfrute de los especialistas.
La solución, como resaltó González-Urbaneja en la clausura sería SIMPLIFICAR + CLARIFICAR + UNIFICAR los criterios; el periodismo sin ciudadanos no es nada, pero el periodismo no es sólo "ciudadanos". La credibilidad está en juego y lo digital debe responder positivamente a ello.
Como puede apreciarse, serían decenas las páginas que podrían relatarse de este Congreso, interesante en forma y contenido, ambicioso, promotor de nuevas visiones, de debate y de conocimiento; en resumen, una buena oportunidad para los profesionales del periodismo y para los que todavía estamos en proyecto.
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario